Recibí el encargo de fotografiar una botella de vino, con la expresa consigna  de eliminar su presencia  para mostrar sólo la etiqueta.

Se trata de  una fotografía  sencilla,  sin embargo tuve que tomar algunos recaudos para  hacer un trabajo correcto y evitar los retoques posteriores que harían perder tiempo, calidad e identidad fotográfica a la imagen, sobre todo tratándose de una foto cuyo destino eran gigantografías y avisos.

Fotografia de botella de vino - Cursos de fotografía digital

Con el fin de  evitar los reflejos coloqué la botella sobre un fondo amplio de terciopelo negro. ¿Porqué terciopelo? Cuando queremos lograr un fondo que sea totalmente negro aunque reciba una cantidad importante de luz, el terciopelo es la única  alternativa. Se trata de una tela  fabricada a la manera de una alfombra. Una base textil  soporta un tejido cuyo bucle es cortado al ras, dando como resultado un producto textil formado por “pelos” firmemente apretados. Además del colorante negro, lo que produce el tono tan oscuro es la propia sombra de los “pelos” o fibras cortadas. De ese modo su reflectancia es menor a la de cualquier tela tejida, cuya fibra, por más oscura que sea, siempre recibe luz. El terciopelo, además de estar teñido de negro, está siempre a la sombra de su propia estructura.  Toda esta complicación tiene su precio y por eso el terciopelo es caro.

Podemos recurrir a la pana de algodón o sintética, pero lo cierto es que el fotómetro casi no reaccionará en presencia del terciopelo original. Uno o dos metros de terciopelo negro deben formar parte del arsenal del fotógrafo. Constituye una inversión de por vida y no estará sujeto a la obsolescencia como otras piezas de su equipo.

Para iluminar con relieve a la etiqueta, recuperando la forma cilíndrica, coloque un flash en una caja de luz pequeña, sobre el lado izquierdo, con una tela con poca difusión para resaltar la textura del papel.  Del lado opuesto ubiqué un flash de estudio con un  paraguas.

Para realzar el dorado de la figura de las montañas, que hasta el momento se veía casi negro, coloqué una tira de papel común a unos centímetros de la etiqueta, lo que también ayudó a enfatizar el reflejo en el dorado del rectángulo superior.

Agregué un espejo para rellenar un poco el frente  de la etiqueta, y hecho esto no quedaba más que medir la luz incidente, chequear el histograma y disparar.

Abrí el archivo RAW sin exagerar el contraste y en la post-producción apliqué Niveles en una capa de ajuste, para  colocar el contraste exacto a la etiqueta y tratar de acercar casi todos los valores negros a cero.  Para comprobar que todos los valores oscuros estuvieran cerca de ese lugar, presioné la tecla Alt mientras desplazaba el cursor de los valores negros de entrada hacia la derecha. Controlé la aplicación de los niveles a través de un canal alfa

La captura RAW original - Fotografía de botella - cursos de fotografía y video

Captura RAW original

Fue innecesario hacer un recorte o dibujar un trazado, porque además de ser una solución poco elegante, no iba a contribuir a  representar el espesor del papel de la etiqueta. El ajuste de niveles mostraba mejor la terminación  del papel sobre el negro del fondo de la botella.

Cuando el ajuste de niveles no alcanzó a oscurecer ciertas partes  de la imagen, pinté de negro las zonas en conflicto.

Una capa de apantallado rellena de gris medio en modo luz suave me permitió controlar los detalles tonales más finos.

 

Archivo fotográfico con las capas apagadas

Archivo con las capas apagadas

Archivo fotográfico con las capas encendidas - Cursos de fotografia digital

Archivo con las capas encendidas

El control de color con el catálogo Pantone hizo necesarias  una capa de Balance de Color y una de color selectivo  para acercar los tonos de la etiqueta a la realidad.

Finalmente guardé todo como un Tiff de 8 bit RGB, al que apliqué una capa de enfoque en paso alto, otra de máscara de enfoque y que entregué luego como archivo final, vía FTP.

Mariano Molinari