Maradona acudió a la cita con cuatro horas y media de retraso, dejando en claro que no pensaba sentarse a la mesa de Pelé. Leibovitz tuvo entonces que recurrir a dobles y trucos de planos para reunirlos en una misma imagen.

Todos sabemos que la foto saldrá igual, Louis Vuitton venderá carteras y las estrellas cobrarán.
“Estoy en la foto, pero nunca me senté a la mesa con Pelé” deja en claro el entrenador de la selección argentina planteando con su actitud un nuevo escalón en la discusión por la verosimilitud de la fotografía.